lunes, 24 de enero de 2011

Trato de arrancar pero no puedo. Estoy hartándome de decir esas frases: "no me dejan", "no puedo". Suena a capricho adolescente al que los padres se resisten a dejar pasar. El problema es que esto es más que un capricho. ESTO es lo que yo siento, es lo que soy. Pero se niegan una y mil veces a aceptarlo, no digo que sea fácil, creo que para cualquier padre es complicado, pero al menos podrían intentarlo. O decirme lo que piensan aunque sea UNA VEZ en la cara, sentarse y hablar, y no por medio de nadie más, ni esquivándome. Tengo muchísima bronca y siento que me asfixio, no puedo seguir así. Me desgasta. Me exprime, me quita hasta la ultima gota de alegría que junto. Me mata. Estoy más que cansada de que me separen de la gente que me hace feliz. No soy más una nena y sé lo que me hace bien y lo que no. Y no puedo estar con un chico. NO PUEDO. Soy diferente, les guste, o no. ME guste, o no. No puedo cambiar. No hay nada que quiera más en todo el mundo que sepan que lo único que me impide ser feliz es esto. Pueden intentar taparlo, pero siempre va a ser igual. Pueden separarme de TODAS las chicas que quieran, pero siempre va a haber una más. Porque el problema no son ellas, SU problema, soy yo. Puedo pensar que cuando cumpla 18 (en un año y un mes) me voy a cualquier lado y hago mi vida, pero no es eso lo que quiero. No quiero pelearme ni desaparecer, estoy harta de eso y no quiero perder a mi familia, no quiero perderlos. Pero no sé qué puedo hacer, la verdad que ya no sé. Puede que haya sido un error decírselo, pero de verdad necesitaba hacerlo. Y me siento completamente decepcionada de ustedes, por decir que me aceptan cuando en realidad no es así. Esto no es un juego para mí, ni un capricho, necesito que sepan que me pudre por dentro esta situación. Pueden prohibirme lo que quieran, o intentar aislarme, o cualquier cosa, pero eso no me va a cambiar, la verdad que no la paso bien así, pero no puedo hacer nada. Perdónenme si esperaban otra cosa de mí, no sé qué más decir.