domingo, 27 de septiembre de 2009


...no decir amén, recuperar el habla y la utopía, ser jóvenes sin prisa y con memoria, situarse en una historia que es la suya, no convertirse en viejos prematuros; respirar, abrir los ojos, descubrir las raíces del horror, inventar paz así sea a ponchazos, entenderse con la naturaleza, y con la lluvia y los relámpagos, y con el sentimiento y con la muerte, esa loca de atar y desatar...
discutir con dios, tanto si existe como si no existe, tender manos que ayudan, abrir puertas, entre el corazón propio y el ajeno, hacer futuro, a pesar de los ruines de pasado y los sabios granujas del presente...

Mario Benedetti

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Dejame un paquetito de caracteres acá abajo